domingo, 10 de diciembre de 2017

EL AMOR... y las consultas sobre amor

El amor es...










... por lo que todo lo demás vale la pena.


Y una vez quitado de en medio mi romanticismo... vamos al tajo!. Gústennos o no, las consultas muy frecuentemente van sobre el amor. En concreto hay una que se repite, y es sobre "el estado de la relación"; "quiero saber en qué punto estamos" o "quiero saber cómo va lo nuestro", es una pregunta demasiado frecuente. Y de nada sirve que yo grite... "¿cómo es posible que lo tengas que preguntar?", o piense... "si lo tienes que preguntar, ¡mal vamos!!"; porque la realidad se impone, y tanto en consultas profesionales, como en las muchas que hacemos entre compis en los grupos de cartomancia, sigue siendo de las preguntas más frecuentes. También, y para regusto mío, la respuesta suele ser coincidente con lo que el sujeto sospechaba y por tanto le había conducido a preguntar. Al fin y al cabo, este ejercicio puede servir de afrontamiento a esa realidad que las emociones impiden afrontar, así que ¡algo bueno se puede lograr!. Va aquí por tanto un sistema sencillo que he comprobado contesta claramente a esta pregunta sobre "el estado de la relación entre dos personas". (Ambos casos son recientes, de parejas heterosexuales, con relación y sin convivencia).


Procedimiento: La sencillez ante todo! En estos casos, colocamos Reina y Rey de copas sobre la mesa, y tras barajar profundamente selecciona el sujeto 5 cartas que extenderemos entre ellos. Nos darán la cualidad e ingredientes del vínculo que los une, describiendo con ello el "estado de la relación". (Con el precioso Tarot Neoclásico o Lombardo de Gumppengberg, Milán).

Caso 1:


Aunque en asuntos sentimentales, los oros no nos traen solamente el tema monetario, no lo debemos de suprimir como ingrediente que puede estar definiendo un vínculo y estado de relación. Aquí vemos un 10 de oros, carta afortunada, de buena suerte, de lujo, pero también por supuesto de dinero, de bastante dinero. ¡Estos dos pelean por asuntos económicos!. Pero además, en este mazo de Tarot, las espadas siguen una tradición española, en la cual no se cruzan, sino que van en caminos divergentes y marcan no sólo desacuerdos, sino diferencias de condición y trayectorias opuestas. O bien tienen muy diferente situación económica, o bien grandes diferencias en cómo gestionar el dinero, y ésta no sólo es área de conflicto, sino que viene antes del componente sentimental, luego, prevalece, preocupa más que los sentimientos. Con un dos y un cuatro de copas, diría que se atraen, se desean, funcionan bien sexualmente, y que sin grandes derroches de amor (pues para eso quiero el arcano mayor VI o el XiX) es una parejita enamorada. Ahora bien, la Fuerza, como arcano mayor en materia de amor, e ilustrada por Hércules matando al león de Nemea, nos habla de un asunto muy serio. Esta relación conlleva una prueba de valor, una  gran superación y doma. Para no asignarlo obligatoriamente a uno de los dos, diríamos que este vínculo les exige la lucha del verdadero valor: vencer al propio ego y no permitir que sea la soberbia lo que supere al amor. Esto, lógicamente, casa bien con las primeras dos cartas. Hay una divergencia o competitividad económico que genera conflicto entre ellos, y aunque los sentimientos que están, son de calidad, la batalla que han de superar es muy intensa y aún no está resuelta. De ahí la consulta, y que la hiciera él, precisamente.

Caso 2:


Comenzamos por un arcano mayor, y nada menos que la Rueda de la Fortuna, pero debemos de leerla desde el tema amor, ojo!. Arcano, por supuesto afortunado, pero también cambiante, caprichoso y efímero como la propia Fortuna. Parece que esta relación está fuertemente marcada por un gran golpe de suerte, un factor azaroso, pero también por los cambios y repeticiones de ciclos. No hay estabilidad aquí, hay fuegos artificiales y bajadas a los infiernos por igual!. Será por eso que es la estabilidad afectiva, el amor sereno, lo que genera conflictos!! (cuatro de copas + dos de espadas) Puede ser que no estén de acuerdo en lo que una pareja estable es, o que la vinculación estable no sea lo que les hace felices. Hasta el punto que la combinación de 10 de copas y 6 de espadas nos podría llevar a pensar en escarceos fuera de la pareja. Dos hipótesis surgen aquí: o bien albergan sentimientos más hondos que no se confiesan, o bien poniendo en perspectiva las cinco cartas e ingredientes, la estabilidad es un problema y la búsqueda de sensaciones plurales, agrava el problema. Como es tema delicado, interesa plantearle para estudio la primera opción, ¿hay inhibición emocional aquí?, ¿son de esos que no se quieren confesar lo hondo de sus sentimientos y retirarse del mercado?, o andamos en juegos peligrosos???. Quizá es por esto la consulta, y que la hiciera ella.

Ay!! el amor!!!
Que las cartas nos indiquen el camino, pero que no se acabe nunca el amor!!
Feliz cartomancia para tod@s.

sábado, 9 de diciembre de 2017

DE LA PERICIA Y DE LA HONESTIDAD

¿Qué, exactamente, te hace un/a buen/a lector/a de cartas?. Y ¿Qué te hace un/a buen/a lector de cartas para otros?. En principio, para mi es grande la diferencia entre las dos preguntas, aunque me sorprendió ver que pocos compañeros compartían esta observación. La detallaré en primer lugar, pues además, no es dicha diferencia el punto más importante de la exploración de hoy.  Saber leer cartas y saber leerlas bien, NO significa de ningún modo que se las leas a los demás, y tampoco que te dediques a ello profesionalmente. Así de simple. Cada vez más se incrementa el número de estudiosos que aprenden la lectura de cartas solamente para la auto consulta. Luego está el grupo que además lee las cartas para familiares y amigos. Y luego está el grupo que hacen de ello una profesión. Pero en todos los casos, la pericia que se requiere y adquiere para leer las cartas es condición necesaria para leerle las cartas a los demás, y NO condición suficiente. En mi opinión, saber leerlas ocupa un lugar central, y leerle las cartas a los demás implica otra capa externa añadida a esa pericia central. Así, a parte de poseer el lenguaje de símbolos y el dominio pleno del mazo que emplees, hay unas estrategias, habilidades, rasgos de carácter, principios y rigor (o ausencia de ellos!!), del propio lector que pueden favorecer o entorpecer la práctica. Todos hemos visto a un compañero enturbiado por su deseo, ego o tozudez, acomodar las cartas para que avalen su hipótesis, y olvidar por completo el lenguaje de símbolos, incluso la mera capacidad de ver la tirada ante sus narices. Y todos hemos visto a compañeros dulcificar o evitar dar la mala noticia, la negativa respuesta, hasta el punto que incluso ante el arcano XIII dicen que "ella se marchó, pero es para un ciclo anual, tras el cual regresa a tu vida, seguro!!!". Lo hemos visto en compañeros, y hemos incurrido en ello!!. Quizá por eso es que pienso que leerle las cartas a los demás conlleva mayor responsabilidad a consultarlas para uno mismo, aunque la pericia requerida sea la misma.

Y es por todo ello que, aunque la clave de la pregunta es troncal a ambas, las plantearé como dos preguntas diferenciadas, para observar también si se repiten naipes en ambas (con el bello Tarot Noir, por Matthieu Hackiere).

¿Qué te hace un buen lector de cartas?...


En primer lugar la agudeza, el veloz filo de la mente y el ojo que cual sable cortan la maleza para acceder al conjunto de símbolos en una necesaria fase de aprendiz. Fase que por igual es necesaria que contaminada. Después habrá que librar y superar la batalla final contra la dificultad y destruir, erradicar todo lo que aprendiste que era errado. El aprendizaje que no supone lucha y esfuerzo para desgranar la verdad, no es aprendizaje, ni es nada!. Entonces surgen las dos claves esenciales que te hacen un/a buena/a lector/a de cartas: la fina y elegante mesura de la Templanza, que vierte el agua al vino acallando toda vehemencia y necesidad condicional; y el poderoso conocimiento que brota de la Papisa, ella que alberga, sabe, y posee más de lo que su libro contiene. 

¿Qué te hace un buen lector de cartas para otros?...


Ante todo, la honestidad!!. La Justicia, equilibrada y racional integridad, le ha de poner freno a todas las tentaciones y malhaceres que nos amarran con ligaduras reprochables a lo bajo. Pareciera que con su fría espada debiera la justa verdad cortar los amarres de consultantes y cartomantes por igual, la tentación vencida por el rigor. Sin embargo, no se acaba ahí aquello que te convierte en un buen cartomante al leer para los demás. Sorpresa! a la crudeza de la fría honestidad hay que además ponerle límites, e incluso guardar oculto parte del proceso y de la información. Filtrarla y depurarla para ofrecer en copa amable aquello que realmente dé vida y salida. Realmente me sorprendió esta respuesta, pues no contemplaba yo posibles, ni admisibles, estas tres últimas cartas. También la diferencia entre las dos respuestas, el hecho de que no se repitiera ningún naipe, que ambas llevaran el mismo número de arcana mayor pero en muy diferente colocación... todos ellos, factores que me hicieron pensar, y que por ello decidí compartir contigo, amante de las cartas!. 

Bucea, indaga, descubre... y muy Feliz Cartomancia!

miércoles, 6 de diciembre de 2017

DEL TAROT Y LOS SUEÑOS

Si prestamos atención, no es tan difícil diferenciar los sueños con mensaje de los sueños que son mera reparación cognitiva. Sabemos que soñamos todas las noches, sabemos que en cada ciclo de sueño hay unos pocos minutos de fase onírica, y que con cada avance de ciclo en la noche se van acortando para que más pronto lleguen esos minutos de fase REM. Sabemos que cumplen una función rehabilitadora y reparadora, y sabemos que podemos soportar más tiempo sin ingesta que sin soñar. Bien. Pero si prestamos atención a aquellos sueños que logremos recordar, o quizá incluso nos hayan despertado, podremos distinguirlos cualitativamente por su contenido. Los sueños de reparación no suelen tener una carga simbólica clara, suelen tener una suficientemente explícita conexión con la realidad cotidiana, y por muy extravagantes que sean, no suelen generar una emoción de intensidad tal que o generen despertar, o se queden adheridos a la memoria hasta la vigilia. No son éstos los que me interesan, claro está, sino los que llamaré "sueños con mensaje". 

Para con los sueños con mensaje está el gran caudal de intentos interpretativos de sus mensajes y lenguaje simbólico; caudal, por supuesto, variopinto, contradictorio y en ocasiones fantasioso, pero siempre sesgado. La respuesta rebelde a varios, muchos, manuales y "diccionarios" de sueños, suele ser la de tomar la vía intuitiva, pues el símbolo empleado, se supone, procede de ti mismo. Lo que para ti sea el animal, parte de la casa, vehículo u objeto protagonista del sueño, lo que para ti representen, eso será lo que transmite el mensaje. Mi experiencia me ha demostrado que no es así, que no es tan simple; pero tampoco he hallado grandes soluciones en los manuales de interpretación onírica. El motivo es sencillo: en el mismo instante en que el símbolo es abordado por la mente racional, en cuanto es traducido por el sistema conceptual aprendido, entramos en dudas, y se sesga la interpretación tanto por uno mismo como por el / la autor /a del manual en cuestión. 

Y ¿el Tarot?, ¿puede el Tarot ayudarnos a entender el mensaje onírico?. He escuchado a compañeros de los dos bandos, absolutos detractores que abanderan la duplicidad de lenguaje simbólico como mera fuente de confusión, y rotundos defensores que avalan que es el mejor método para comprender el sueño. Sinceramente no tengo una opinión propia suficientemente constatada, y de ahí la presente investigación. 

Sueño: Estoy dormida en mi cama, y oigo claramente como están violentando la puerta de entrada a mi casa, la lucidez y nitidez de luz y color, y la fuerza de los sonidos de golpes y herramientas en la puerta para forzarla es increíble. Me grito a mi misma, "levántate, muévete, van a entrar, haz algo!!" y (típico) no me puedo mover. Siento claramente 2 emociones muy intensas y antagónicas: pánico en alarma y calma feliz. El pánico cede a la sonrisa, "no lo van a conseguir" oigo mi voz claramente y me despierto con la resaca de la mezcla emocional intensa. (No es un sueño de particular fuerza simbólica comparado con otras "perlas" que tengo en mi haber, pero es reciente y suficiente para el estudio con las cartas que busco). Se me ocurren 3 interpretaciones muy diferentes - y 2 son contradictorias, opuestas entre sí -, las 3 válidas y correlativas con temas abiertos en mi vida actual. También típico!. Por lo tanto, preguntémosle al libro: ¿qué quiere decir este sueño? (obviamente, pudiendo la respuesta ser, nada de particular!). 


Primero demos ese paseo al estilo Enriquez como barrido inicial y toma de conexión con la tirada, "Un hombre encapuchado, camina en la noche, guiado por su candil y su cayado. Aunque va hacia la izquierda, se detiene a mirar en la dirección opuesta. Su mirada es triste y cansada, pero parece también de aviso, así como "mira! presta atención a eso"... De un cayado parecido al suyo, pero con vida, han brotado dos ramas en flor, dos rosas, ya amarillentas y un poco ajadas que no se lograron abrir. Y en la siguiente carta, la escena se ha duplicado en más de un sentido: las rosas están cortadas y separadas, ahora rojas con pasión y frescor, y dos personas ocultas yerguen con sus manos dos ramas que se cruzan. Una oposición y enfrentamiento de fuerzas igualadas en poder, que parecen quedar en empate. Vemos al dueño de una de esas varas, mirando recelosamente al empate estanco. Sostiene su vara cabeza abajo en actitud de desconfianza y malestar. A continuación una bella dama vierte agua en una noche estrellada; su desnudez y cercanía a las estrellas nos dejan claro que no es de este mundo, pareciera que va a verter el agua sobre toda la escena".

De mis posibles interpretaciones originales del sueño y su conexión con temas abiertos en mi vida, ahora ya no me queda duda de cuál es la correcta. La presencia de los dos arcanos mayores, me avala que sí es un sueño con mensaje (por si me quedaba alguna duda!). El Ermitaño me da la cualidad del sueño, es un sueño de anuncio, de iluminación y esclarecimiento. Las 3 cartas centrales, me dan el tema específico de los posibles asuntos abiertos y el personaje en cuestión. Y la bella Estrella, me indica que de las dos emociones antagonistas e intensas que tuve en el sueño, la de la calma feliz era la correcta. El buen augurio matiza el aviso del Ermitaño. 

Empiezo a tener más claro que el Tarot sí nos puede aclarar el mensaje de un sueño ... con mensaje.
Como siempre... ¡Felices lecturas!.

¿QUÉ NOS MUESTRA EL TAROT?

Podría haber planteado la pregunta sobre cómo funciona, por qué y qué es lo que logra que las cartas seleccionadas, de hecho contesten a la pregunta; pero la muy punzante y aguda Camelia Elias me hace pensar hoy sobre otros senderos paralelos, demasiado atractivos para estas Investigaciones Cartománticas. (Imprescindible leer a nuestra Camelia www.taroflexions.wordpress.com ). Lo que más valoro de sus escritos es que o me irritan y enfurecen, o me hacen reír y sentirme en casa, pero nunca me deja impasible un artículo de ella, ¡gracias, Camelia!. Una de sus propuestas "eléctricas" es que las cartas no se asoman al futuro tal y como entendemos el concepto de futuro desde un planteamiento dualista, y lineal - temporal. En su lugar, propone que las cartas nos muestran el ángulo ciego que tenemos en la situación, nos permiten una vista de pájaro. Y que el descubrimiento de aquello que no podíamos ver es lo que hemos consensuado en llamar "futuro". Apasionante!, torbellino de ideas que se alzan desde el fondo de mi mente, genial!!.

Una consulta imperiosa nace de ese torbellino, y para este viaje me acompañarán otros dos grandes amigos: el Tarot de Marsella por Pole Ka, y la metodología de Enrique Enriquez para la lectura, (no me cansaré de reiterar otro imprescindible http://www.mindseyeview.com/marseilles-tarot.html el único manual de Tarot que realmente me enseñó a leer cartas). 

Ahora vamos con la consulta: ¿qué es lo que nos muestran las cartas cuando las consultamos?. 


Aunque este Marsella no es uno tradicional y purista, como Enriquez recomienda, tiene una fuerza, pasión y desgarro que estimula la aplicación del método muy especialmente. "Olvida los significados de las cartas, di qué ves, que está pasando y cómo se siente", este es el bastón que Enriquez nos da para caminar por una tirada de cartas, luego, vamos allá!... "Un caballo encabritado ha tirado a su caballero al suelo, y su copa se ha derramado. Se rompieron sus planes, se modificó su curso y seguridad, está perplejo, está en shock. Entonces se le revuelve el estómago, tiene nauseas y necesita vomitar, expulsa un montón de monedas de oro. El alivio de la descarga, se le combina con la maravilla de su contenido, por lo tanto lo mira en detalle. De nueve monedas de oro que se ven en el suelo, una sobresale, está enredada, aislada entre ramas y vísceras, pero cuando vuelve a mirar, ha desaparecido!, en su lugar dejó solamente las vísceras. ¿Dónde fue esa moneda?. Oye entonces desde el cielo el sonido de una trompeta, mira hacia las nubes; un ser que no es de este mundo lanza mensajes a un grupo de personajes que tampoco están con el caballero en su mismo plano y lugar; de los personajes unos están temerosos y otros atentos o risueños. Y tras ese ser, una fuente de sabiduría en forma de mujer imposible, una Papisa, lee la Biblia, parece ser ella quien le da la información al ser de la trompeta, se ve enigmática, oculta, misteriosa, muy concentrada consultando los símbolos".  El Tarot aparece cuando se han roto nuestros esquemas, se nutre del shock emocional, pues no lo consultamos en momentos de seguridad, sino en momentos de perplejidad, cuando nos caímos, o cuando necesitamos que se llene nuestra copa con respuestas. Para darnos estas respuestas el Tarot emplea contenidos nuestros, de nuestro mismo interior, utiliza piezas de conocimiento valioso que ya poseemos, pero que están incompletas, carentes de elementos más valiosos que no están en nuestro interior y que hay que re emplazar y completar. En la consulta queda abierto el espacio para el descubrimiento, para la recepción de revelaciones que proceden de otro plano y lugar, un plano y lugar por igual común a todos nosotros, que atemporal, una fuente de mensajes que a veces nos hacen temblar y otras aplaudir. Pero muy importante, pareciera que esos mensajes, ya fueron registrados anteriormente en textos simbólicos y sagrados para poder ser leídos, para poder ser consultados. El Tarot no deja de ser un libro que ahora ya sabemos qué contiene y qué nos muestra. Después de la consulta y gracias a ella, podremos volver a subir al caballo y continuar nuestro camino con la copa llena. Y esto es lo que nos muestra el Tarot. 

No me sorprendió la combinación de conocimiento interno que ya albergamos, con fuentes de otro plano registradas en los símbolos, pero sí me llamó la atención la simetría que creo percibir entre la respuesta y la sugerencia de Camelia Elias sobre el descubrimiento de puntos ciegos. ¿Pudiera ser cierto que al lograr ver una parte de la situación que estaba oculta, es precisamente su conocimiento lo que nos permite identificar eso que llamamos futuro?. Este segundo y delicioso plato lo degustaremos... otro día!. 

Felices consultas!.